película "Informe Kinsey"

CENTRO DE INVESTIGACIONES PSIQUIÁTRICAS, PSICOLÓGICAS Y

SEXOLÓGICAS DE VENEZUELA

(C.I.P.P.S.V. – ON LINE)

MAESTRÍA EN CIENCIAS – MENCIÓN ORIENTACIÓN EN SEXOLOGÍA

ASIGNATURA:    FAO III

DOCENTE: PSIC.  BRAYNER LÓPEZ

09/05/2014

Maestrante: Neyda Ruiz (Táchira)

CI 8.105.943

PELÍCULA INFORME KINSEY

       

En la época en que Alfred Kinsey realizó sus investigaciones sobre sexualidad, y en que todo lo referente a este tema era catalogado como obsceno, pecado, sucio, prohibido, este prominente Psicólogo norteamericano,  en los años 1938 realizó estudios sobre el comportamiento sexual de hombres y mujeres,  Kinsey propone impartir educación sexual con un nuevo enfoque y acomete la dirección de un seminario sobre matrimonio y familia. Utiliza el curso para obtener información de sus propios estudiantes sobre sus experiencias sexuales, cosa que sirve como iniciación de lo que sería su aprendizaje para una de las más grandes investigaciones (el informe que lleva su nombre), aunque tuvo que  suspenderlo por las reiteradas quejas de los pupilos, quienes opinaban sobre sus aberrantes comentarios respecto a la sexualidad, que inquietaban bastante por ser muy explícitos y sin límites morales ni éticos.

Por otra parte, a pesar de que fue muy reconocido y sus estudios aceptados por unos y muy criticado por otros, fueron puestos en práctica para orientar la conducta sexual de muchos niños, adolescentes y adultos a nivel de Instituciones Educativas y que aún en la actualidad en los Estados Unidos, lo citan como un renombrado estudioso en el tema de la sexualidad.

Sin embargo otros teóricos, manifiestan su total rechazo a estas investigaciones, pues los datos recogidos por ellos,  fueron  a través de entrevistas. Lo cual fue criticado por la falta de validez y confiabilidad de los entrevistados. Es así como, para  la validez de la entrevista Pourtois y Desmont (1992) citado por Rojas (2010:96)[1] "proponen la triangulación interna o crítica de identidad, y sugieren conocer bien a los entrevistados en sus componentes afectivos, personales, sociológicos", así como que lo que sostienen es original y no testimonio referido de otros. "Proponen, asimismo la validez de significancia dirigida a descubrir el sentido que le dan los sujetos a las palabras", a través de darles copia de la entrevista realizada.

Por lo que  aplicaron de nuevo las entrevistas en un lapso de dos años. Las conclusiones de los trabajos llevan a considerar específicas formas de conducta sexual, ya que la evaluación de lo moral o ético están fuera del alcance del método científico. En ese momento los resultados aportaron la siguiente tabla de clasificación de la sexualidad en hombres y mujeres:

Kinsey confeccionó esta Escala sobre la heterosexualidad-homosexualidad exclusiva y dominante, donde el grado 0 manifestaba una heterosexualidad completa sin ambages y el 6 una homosexualidad  exclusiva y dominante. Encontró que la mayoría de las personas se encontraban dentro del número 1 o 2 en su escala. Sus conclusiones fueron que eran un poco homosexuales o bisexuales (encontrándose entre los valores 1 y 5). Informó que un 37% de la población de varones en los Estados Unidos habían alcanzado el orgasmo en contacto con otro varón durante la adolescencia. Por lo que, realizaron 18.000 entrevistas y publicaron "El comportamiento sexual en el hombre" en 1948 y "Comportamiento sexual en la mujer" en 1953. Sobre la base de más de 5.300 entrevistas personales con hombres de raza blanca llegó a una serie de conclusiones acerca de la homosexualidad.

Por su parte la  Dra. en Bioética Marta Tarasco[2]  , en su revisión sobre las consecuencias del informe Kinsey, fue concluyente. Hace 50 años, entre 1948 y 1950, Alfred Kinsey, realizó estudios cuyos resultados contribuyeron a desatar la llamada "revolución sexual". Kinsey, defendió que todos los comportamientos sexuales que se consideraban desviados son normales, mientras que propuso que el ser exclusivamente heterosexual es anormal y producto de inhibiciones culturales y de condicionamientos sociales. Kinsey, compartió la visión sobre el hecho de que los cristianos habían heredado la aproximación casi paranoide del comportamiento sexual de los judíos.

Después de 40 años, en los cuales se había dado credibilidad absoluta a dichos datos, con las consecuencias que conllevaron para la sociedad a nivel moral e intelectual, científicos de varios países junto con el F.B.I. demostraron la falsedad de tales conclusiones y el poco rigor científico en las mismas. Los datos habían sido estadísticamente manipulados porque la muestra era manifiestamente sesgada, con un número importante de presos, exhibicionistas, pedófilos y vejadores sexuales, incluyendo en la metodología vejaciones y estimulación sexual de adultos a niños de meses.

            En este sentido, por su parte, la Dra. Judith Reishman en 1981, descubrió el papel del abuso sexual en los estudios de Kinsey, en una ponencia presentada al V Congreso de Sexología de Jerusalén.

    En 1990 la Dra. Reishman y Edward W. Eichel escribieron el libro esclarecedor “Kinsey, Sexo y Fraude” que revela la evidencia de cómo los niños fueron sexualmente abusados por adultos en nombre de la “ciencia”. Ella documentó, en los trabajos de Kinsey, más de 300 niños desde los dos meses de edad hasta los 15 años de edad.     “Yo revisé el informe de Kinsey, ‘Comportamiento sexual en los varones humanos’. Cuando revisé las tablas, me quedé espantada. ¿Cómo pudieron conseguir estos datos? ¿Cómo pudieron saber que un bebé de dos meses de edad tiene o no tiene un orgasmo?(datos de la tabla 31) ¿Cómo obtuvieron un registro de 26 orgasmos en 24 horas para un niño de 4 años de edad? (datos de la tabla 34).
Si estos experimentos tuvieron lugar, involucraron actos en que los niños no podían dar su consentimiento y en que ni los padres ni los custodios podían proporcionar su consentimiento en la mitad de los niños. Por tanto, estamos hablando de una actividad de carácter criminal: el abuso sexual de los niños.” Y para completar, el coautor de Kinsey: Wardell Pomeroy educador sexual y sexólogo ha escrito que la investigación de Kinsey también descubrió muchas relaciones agradables entre padres e hijos (incesto) y abogó por las posibles "relaciones sexuales amorosas entre niños y animales" (bestialismo).

Las investigaciones que generan gran controversia son las que se refieren a la actividad sexual en la infancia. El instituto Kinsey declara que las información utilizada se basa en las observaciones de padres y docentes, en los recuerdos infantiles de adultos y en entrevistas realizadas a un grupo de nueve pedófilos. Kinsey declaró que creyó que conservar el anonimato de los entrevistados contribuiría a la comunidad científica, en el sentido de que permitía poseer documentación escrita sobre la situación. Como las cintas de las entrevistas realizadas no se han hecho públicas, esto da lugar a la creencia de ciertos grupos de que el Instituto Kinsey realizaba experimentos llevados a cabo con varios cientos de niños —desde los dos meses a los 15 años—, y que éstos consistieron en actos sexuales perpetrados por un grupo de nueve personas, algunas de ellas ‘entrenadas’. El Informe Kinsey «sobre los hombres», afirma que los niños reaccionaron a las manipulaciones sexuales por parte de los nueve adultos de diversas maneras: se retorcían, gritaban horriblemente, tenían violentas convulsiones, grandes temblores y/o experimentaban horribles dolores[3]
Hechos que aún en la actualidad, a pesar de los adelantos en sexología y la apertura mental hacia estos temas, siguen siendo muy cuestionados. 

Murió en 1956 en la edad de 62 años a causa de una neumonía

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[1] Rojas, B. (2010). Investigación Cualitativa. Fundamentos y Praxis. Caracas: Fedeupel

[2] Tarasco, M. (1997), Consideraciones sobre la Influencia del Reporte Kinsey. En Cuadernos de Bioética.4º..

[3] Kinsey Establishes the Institute for Sex Research». American Experience: Kinsey. PBS. Consultado el 3 de enero de. 2008